Los secretos de 'Sexo en Nueva York' en su 15º aniversario
15 años después, aún quedan muchos secretos por desvelar. En 1998, HBO trazaba un nuevo camino en la ficción televisiva con el estreno de Sexo en Nueva York, la serie que en seis temporadas adaptó el libro del mismo nombre escrito por la periodista Candace Bushnell, quien durante años se dedicó a relatar la vida sexual de los habitantes de Nueva York en su columna en el New York Observer. Después de seis temporadas, terminó en 2004. Tiempo durante el cual fue nominada para los Emmy 50 veces, de las que ganó siete, incluyendo el de mejor papel protagonista para Sarah Jessica Parker.
Cosmopolitan TV celebra en junio el aniversario de esta comedia recuperándola desde el primer episodio (de lunes a viernes, maratón diario de cinco capítulos a partir de las 19.15). También emitirá la película producida al finalizar SNY, el día 27 a las 22.30.
Entre los secretos que desvela Cosmopolitan:
Kim Cattrall estuvo cerca de quedar fuera de la serie. La actriz rechazó dos veces el papel de Samantha Jones. Es más, tuvo que intervenir el novio del creador de la serie, Darren Star, quien la convenció para que grabara, al menos, el piloto.
Miranda (Cynthia Nixon), la pelirroja del grupo de las chicas de Sexo en Nueva York, es, en realidad, rubia natural.
Sarah Jessica Parker incluyó una cláusula en la que se negaba a hacer desnudos totales. Y se cumplió. Por eso, de las cuatro amigas, ella es la que única que, como lo más osado, se mostró en ropa interior.
La ciudad es un protagonista más de la serie. Y Nueva York era, hasta 2001, las Torres Gemelas. Por eso, después del ataque al World Trade Center de ese año, se modificaron los títulos de crédito y el logo principal. El Empire State apareció como la nueva imagen.
La quinta temporada sólo tuvo cinco capítulos, porque Sarah Jessica Parker estaba embarazada de su primer hijo, James, que nació el 28 de octubre de 2002. La primera temporada tuvo doce capítulos, las siguientes tres, 18 y la última, 20.
Cuando Sarah Jessica Parker se quedó encinta, los productores no quisieron convertir a su personaje, Carrie Bradshaw en mamá, así que los diseñadores de vestuario se encargaron de llenar el armario de la escritora con multitud de vestidos holgados que disimulasen su barriga.
Casi al mismo tiempo, también Cynthia Nixon esperaba un hijo. Los guionistas incorporaron su embarazo real a la ficción y su personaje tuvo un bebé.
Cameos. Varios fueron los nombres que se manejaron para Escape de Nueva York (capítulo 3x13). Alec Baldwin fue el elegido originalmente, pero decidió no hacerlo. George Clooney fue la segunda opción. Si bien se mostró interesado, no pudo por problemas de agenda. El tercero fue Warren Beatty, pero también dijo que no. Entonces ya se escogió a Matthew McConaughey. La serie contó con otros cameos, como Donald Trump, Hugh Hefner o Alanis Morrisette.
Antes de que el rodaje de la serie comenzase, Sarah Jessica Parker echó el ojo a un mismo botiquín en un rastro junto a su entonces todavía novio -con el que se casaría y tendría 3 hijos- Matthew Broderick, pero no lo compraron en esa ocasión. Cuando volvieron a por él, el tendero dijo que ya lo había vendido para "alguna serie nueva". Cuando ella se presentó el primer día de rodaje, se encontró con que allí estaba el mismo botiquín.
La actriz Cynthia Nixon, que interpreta a Miranda, en realidad no tiene agujeros en sus orejas, por lo que todos los pendientes que luce en la serie son de pinza. De hecho, cuando a los diseñadores de vestuario les gustaba un modelo clásico expresamente para Miranda, lo enviaban a un joyero para que lo transformase en pendientes de pinza.
Y después de aquel éxito, ¿qué fue de las protagonistas de Sexo en Nueva York?
Sarah Jessica Parker. Es la que más provecho ha sacado, convirtiéndose en una it girl a imitar. Ha diseñado ropa, tiene sus propios perfumes y sigue con su carrera como actriz. Tras el fin de la serie, Sarah Jessica se centró en el cine. En 2005 estrenó La joya de la familia, por la que fue nominada al Globo de Oro a la mejor actriz de comedia. En 2006 estrenó el gran éxito de taquilla Novia por contrato junto a Matthew McConaughey. Últimamente ha participado como actriz invitada en varios episodios de la última temporada de Glee, donde da vida a la directora de una web de moda. Además, repitió maternidad con unas mellizas, a través de un vientre de alquiler.
Kim Catrall. En los últimos años se ha centrado en el teatro. En 2011 interpretó Vidas privadas en Broadway y el pasado año estuvo de gira con Antonio y Cleopatra por Reino Unido. Tiene pendiente de estreno la serie Sensitive Skin, una comedia que adapta una serie británica del mismo título.
Chyntia Nixon. Desde que dejó de ser la abogada Miranda, su vida ha dado un giro. Se divorció de Danny Mozes y se casó con la activista Christine Marinoni. Siguió en televisión haciendo cameos en varias series, como House en 2005, y en 2007 en Ley y Orden: Unidad de Victimas Especiales, por el que ganó un premio Emmy a la mejor actriz invitada. Su próxima película será A Quiet Passion de Terrence Dickinson.
Kristen Davis. Tuvo pequeños papeles en series como Melrose Place, Emergencias y Friends, hasta que llegó Charlotte. Después de decirle adiós, participó en la miniserie Of Two Minds y ahora formará parte del reparto de Bad Teacher que en principio se estrenará la próxima temporada. En octubre de 2011, Kristen adoptó una niña, tal y como hizo su personaje de Charlotte. Actualmente ella y su hija, Gemma Rose Davis, viven felizmente en Los Ángeles, California. La actriz está soltera y nunca se ha casado.