El comité de ética publicitaria de Bélgica (JEP, por sus siglas en francés) ha ordenado la retirada de la última campaña de la marca Calvin Klein -en la que aparece una joven en ropa interior-, por "banalizar" el sexting entre los jóvenes.
"Teniendo en cuenta el contexto social actual y la cuestión de la práctica del envío de selfis eróticos entre los jóvenes, consideramos que el anuncio que banaliza de este modo un fenómeno que puede llegar a ser dramático está fuera de lugar", ha dictaminado el grupo de expertos.
El órgano ético ha recibido al menos 13 quejas que denuncian desde la asociación de la mujer como objeto, hasta un atentado al pudor, pasando por la banalización de la pornografía, según la cadena RTBF, que ha publicado el razonamiento de la orden de retirada.
En su escrito, el comité ha valorado que la campaña simula una autofoto de una mujer "muy joven", que adopta una postura con la que "resalta su escote más que la lencería que anuncia".
Los carteles de la campaña están presentes sobre todo en marquesinas de paradas autobús y mobiliario urbano, y en ellos aparece la foto de medio cuerpo de una joven en ropa interior y un mensaje en inglés que parece destinado a las redes sociales: "I take what I want in #mycalvins. Anna Ewers, model" ("Nadie puede resistirse a mí cuando llevo mis Calvin").
Sin embargo, el JEP ha concluido que la composición se aleja del objetivo primero de promocionar un artículo de lencería y potencia la referencia a las redes sociales en las que "se intercambian de manera incontrolada" este tipo de fotografías.