El 'voto del arrepentimiento' llega a 'Ven a cenar conmigo'
Cene, compare, y si encuentra algo mejor… cambie su votación. A partir del lunes 25 de diciembre (Cuatro, 20.30), Ven a cenar conmigo en su dinámica de votaciones que harán de la competición una disputada carrera hasta el final de la última cena con la irrupción del voto de arrepentimiento. Cinco comensales de Madrid dispuestos a proclamarse como el último gran anfitrión de 2017 serán los primeros en disfrutar de este privilegio en el concurso de Cuatro.
¿En qué consiste el voto del arrepentimiento? La mecánica de votaciones de Ven a cenar conmigo es muy sencilla: al finalizar cada velada, los comensales invitados emiten su veredicto de manera secreta. Y en la quinta cena, se recuentan las puntuaciones y se proclama un ganador.
A partir de esta semana, antes de conocer al ganador, cada uno de los cinco concursantes podrán replantearse uno de sus veredictos y ajustarlo a sus nuevas impresiones.
Así, cenas que en un principio se valoraron de 10 y que terminaron siendo eclipsadas en las siguientes veladas, pueden encontrarse en dificultades en esta fase final. O por el contrario, primeras votaciones catastróficas que condenaron a resultados muy bajos pueden ser redimidas en el último momento después de cinco noches de risas y amistad.
El llamado voto de arrepentimiento, solo podrá ser utilizado para modificar una única puntuación y su uso, libre y voluntario, se producirá siempre antes de conocer al ganador semanal, lo que otorgará un extra de suspense y emoción al programa. De este modo, hasta la última cena nada estará decidido.
La última semana del año, Ven a cenar conmigo recala en la capital, con todos sus comensales listos para tomarse las uvas de la suerte, a ver si en esta ocasión vienen precedidas de 3.000 euros de premio.
Javier, de 43 años, será el primer anfitrión. Muy educado y correcto, no cederá ante las extravagancias de Carolina, segunda concursante y experta en reventar cenas.
En el polo opuesto está Carlota, discreta, recatada y poco amiga de las polémicas. Su falta de aspiraciones será su mejor arma para alcanzar el liderazgo.
Patricia, cuarta anfitriona, será mucho más extrovertida y simpática. Ella será la principal abanderada contra Carolina.
Luis, último participante de la semana, sueña con ser multimillonario. 3.000 euros le parecen un buen pellizco para comenzar.