Denuncias falsas de turistas ingleses para no pagar las vacaciones, 'En el punto de mira'
Cientos de turistas británicos han incluido entre sus rutinas vacacionales poner reclamaciones por intoxicación alimentaria a los hoteles y lugares de hospedaje para recuperar así el dinero gastado durante sus días en España. Se trata de una forma de turismo alternativo publicitado por numerosos despachos de abogados ingleses y cuyas pérdidas suponen para el sector 50 millones de euros. ¿Qué se esconde tras esta ola de denuncias supuestamente falsas? Sobre esta pregunta gira el primer reportaje de la nueva entrega de En el punto de mira, que Cuatro emite el 12 de junio (22.40).
La segunda pieza informativa, dedicada a la estafa alimentaria que se esconde detrás de las falsas Denominaciones de Origen, destapará una red de importación de azafrán iraní que en el mercado español es vendido posteriormente como originario de La Mancha. Las imágenes del reportaje y las pruebas obtenidas durante su filmación ya están en poder de la Guardia Civil, que ha abierto una investigacióninvestigación.
Los reporteros Verónica Dulanto y Boro Barber investigan qué hay de cierto en las supuestas intoxicaciones que los turistas ingleses reclaman y cuyas indemnizaciones suponen para el sector unas pérdidas de 50 millones de euros. Cada año llegan a España 17 millones de británicos. Algunos de ellos deciden ahorrarse el dinero gastado en alojamiento contratando con un turoperador británico sus vacaciones en España con transporte y comidas incluidos. A su regreso, los turistas ponen una reclamación por intoxicación alimentaria, y el turoperador reclama el dinero al hotel donde han sido alojados. Los hoteleros españoles denuncian que estas falsas reclamaciones han aumentado un 700%.
El espacio intentará recabar los testimonios de dos denunciantes británicos, que se negarán ante las cámaras a responder a las preguntas. Algo similar ocurre con un bufete de abogados que publicita en su web reclamaciones turísticas. En el punto de mira grabará con cámara oculta qué ocurre realmente en los despachos de abogados y lo fácil que es reclamar a un hotel español por intoxicación alimentaria sin apenas ninguna prueba que lo demuestre. Ante esta situación, una queja formal de las autoridades españolas ha obligado al Gobierno británico a incluir entre sus consejos para viajar a otros países que poner falsas reclamaciones puede volverse en contra del turista y tener consecuencias legales para él.
En el punto de mira se trasladará también hasta Tenerife para comprobar in situ que los despachos de abogados tienen también en una de las islas Canarias más turísticas una red de comerciales que informan a los turistas cómo recuperar el dinero de las vacaciones. Los reporteros del programa recorrerán centros médicos y entrevistarán a médicos en la isla para comprobar que apenas se producen consultas al año por intoxicación alimentaria, algo que contradice el creciente número de reclamaciones.
En el punto de mira analizará en el segundo reportaje de la noche el fenómeno de las Denominaciones de Origen (DO) en España y de algunas de las irregularidades que se cometen en su nombre. La Denominación de Origen es un distintivo de calidad, cuyos productos se venden más caros en el mercado. Amparadas en esta realidad, algunas empresas agroalimentarias tratan de defraudar al consumidor y otras de defenderse para mantener su prestigio y sus ventas.
El programa descubrirá la trampa del azafrán de La Mancha. En este caso, una empresa con productos DO tiene una segunda línea de producto en la que venden azafrán iraní. Cuando el producto llega hasta el consumidor, ambos productos (el azafrán con DO y el exportado de Irán) tienen una apariencia, empaquetado y hasta etiquetado tan similar que resultan muy complicados de distinguir e inducen al error en el consumidor.
Para conseguir un kilo de azafrán se necesitan unas 250.000 flores recolectadas de forma artesanal desde hace siglos en los campos de La Mancha. Pero España importa al año entre 70 y 80 toneladas de azafrán iraní, algo que parece confirmar los datos que se desprenden de un estudio de la Universidad de Valencia y de un laboratorio en Praga que afirman que la mitad del azafrán que se etiqueta en España no es español.
Tras este reportaje de En el punto de mira, la Guardia Civil ha decidido llevar a cabo una investigación sobre el azafrán iraní en La ManchainvestigaciónazafránLa Mancha.