La familia Canela-Margarit se dispone a realizar su última expedición. Espíritu salvaje concluye Espíritu salvajesu travesía en Cuatro, con el viaje más difícil hasta el momento: una travesía en la que toda la familia pone rumbo a Groenlandia.
En la segunda mayor reserva de hielo del mundo habita el buey almizclero, que, pese a su parecido con los bisontes, pertenece a la familia de las cabras u ovejas. Fotografiar una manada de esta especie será el objetivo del cabeza de familia, Andoni Canela.
La familia al completo descubrirá, nada más llegar a tierras de Groenlandia, una de las particularidades del territorio: a medianoche, el sol brilla en lo alto. Durante el verano, y debido a la latitud del lugar, hay prácticamente luz todo el día. Conciliar el sueño supone todo un problema para la familia Canela-Margarit. Por ello, deciden no dormir al raso y meterse en la tienda de campaña para descansar.
Mientras buscan la manada perfecta para la fotografía, toda la familia se va de excursión al glaciar Russel, con una altura de 25 metros. La familia desea poder inmortalizar a todo un grupo de bueyes almizclero en este paraje helado, donde las temperaturas bajan hasta los grados negativos, pero los sueños no siempre se cumplen...
De vuelta al campamento e impacientes porque no tienen la foto deseada, los chicos de la familia tendrán que realizar largas caminatas, e incluso atravesar zonas en piragua, para llegar al enclave en el que posiblemente viva la manada.