Céline Dion reanuda en la noche del martes 23 de febrero sus veladas en el Coliseo de Las Vegas, en la que será su primera actuación desde la muerte de su esposo, René Angelil, el pasado 14 de enero, y al que dedica la vuelta a los escenarios y una exposición que recorre su vida y su profesión.
"Estamos encantados de anunciar el regreso de Céline en el Coliseo del Caesars Palace de Las Vegas. Únete a Céline y sus fans en Las Vegas para un viaje al pasado, en vivo en el Coliseo, para celebrar su regreso y el homenaje amoroso a Réne de Céline", decía un mensaje en la página web de la cantante canadiense.
Una fuente cercana a la artista confirmó que los diez primeros minutos del espectáculo podrán verse en directo vía streaming"Estoy seguro de que va a ser muy emotivo. Ella no va a superarlo rápidamente", añadía el mismo informante.
Poco a poco, la estrella musical recupera la normalidad, cumpliendo los deseos del que fuera su marido. La intérprete de 47 años tiene residencia asegurada en la ciudad del pecado hasta 2019, y será Aldo Giampaolo, amigo íntimo de René, el encargado de representar a la cantante a partir de ahora.
Además, para esta primavera hay previsto el lanzamiento de un nuevo disco en francés y para el año que viene debería publicar un álbum en inglés y también tener producida una línea de ropa.
La venta de algunas propiedades del fallecido han hecho pensar en que atravesara problemas económicos, pero lo cierto es que hay mucho patrimonio por repartir entre sus seis hijos: los tres que tuvo con la cantante; el primogénito, Patrick, fruto de su primer matrimonio, con Denyse Duquette; y los dos, Jean-Pierre y Anne-Marie, que tuvo con su segunda mujer, Anne Renee Kirouac.
Según desvelaba el diario La Presse, Céline ha vendido su casa en Quebec, por la que pedía hace dos años 25,5 millones de dólares (23,2 millones de euros); y su mansión de Jupiter Island (Florida), que empezó vendiendo por 72,5 millones de dólares (66 millones de euros) y por la que ahora podría conformarse con casi la mitad.