Netflix acaba con 'House of cards' tras la denuncia de acoso contra Kevin Spacey
El escándalo Kevin Spacey -se ha disculpado ante Anthony Rapp, que le ha acusado de abusar sexualmente de él en 1986, cuando tenía 14 años- se ha cobrado su primera víctima: Netflix no seguirá produciendo House of cards, serie donde interpreta a un perverso presidente de Estados Unidos. La versión oficial del servicio de streaming es que su plan ya era terminar la ficción tras la sexta temporada.
Según Netflix, el testimonio y la explicación del intérprete no han sido los más adecuados, y menos que el protagonista junto a Robin Wright de una de sus series de más éxito sea noticia por un asunto tan turbio.
El oscarizado actor -premiado como protagonista por American beauty en 2000 y como secundario por Sospechosos habituales (1996)- ha aprovechado su declaración pública de petición de perdón a Rapp (Una mente maravillosa, Star Trek: Discovery) para declararse homosexual, una confesión que ha desviado la atención en unas semanas en las que Hollywood es un hervidero de acusaciones de acoso sexual, tras el caso del productor Harvey Weinstein.
Rapp ya había relatado este suceso en su círculo más íntimo, según ha explicado en unas declaraciones a The New York Times. La actriz Erin Quill (The following) asegura que Rapp le contó este incidente en 2001.
Los hechos que ha denunciado ahora públicamente el actor de Star Trek: Discovery se remontan a 1986, cuando asistió a un una fiesta del actor de House of cards cuando él tan solo tenía 14 años y su anfitrión 26.
Según Rapp, Spacey le cogió en volandas, le metió en una habitación, le echó sobre la cama y se puso encima de él. El intérprete logró zafarse y huir. Kevin Spacey, en su Twitter personal, ha lamentado el suceso, sugiriendo que no se acordaba de lo pasado debido a los excesos del alcohol: "Lamento lo sucedido, si es cierto (porque no me acuerdo)".
Kevin Spacey ha aprovechado para contar que le gustan tanto los hombres como las mujeres, y que ahora ha decidido vivir como un hombre gay.
Tan solo 24 horas después, el hermano mayor de Kevin Spacey, el imitador Randall Fowler, de 62 años, contó a Daily Mail que su padre era "un nazi y un violador y que vivieron una casa de los terrores, además de que abusó de él y maltrató a la familia.
Latigazos, golpes y abusos sexuales regulares que Fowler nunca olvidará y que le hicieron dudar si tener hijos por "si él tenía el gen de depredador sexual como su padre". La familia se mudó hasta diez veces de casa, y no recibían a sus amigos para evitar que viesen las fotografías pornográficas que había colgadas en las paredes, según ha contado Randall Fowler al Daily Mail.
El hermano mayor del actor de House of the cards también ha tenido palabras para éste; asegura que, debido a lo vivido, Kevin Spacey se metió en una burbuja y que no tiene sentimientos.