Álex García atraviesa un excelente momento profesional -es candidato al Goya a mejor actor revelación por su papel en la recién estrenada La novia- y parece que también personal. Si de lo primero presume -"estamos muy ilusionados porque sobre todo la gente joven esta conectando muchísimo con la película"-, con lo segundo manifiesta recelo.

Tras la reciente publicación de unas fotografías en las que aparecía besándose con su compañera en la obra de teatro El burlador de Sevilla, Manuela Vellés, el exprotagonista de Tierra de lobos se queja de que los medios no le llamen para pedir su versión, pero cuando se le demanda, responde que del asunto no habla.

De confirmarse esta relación, habría acabado la que ha mantenido hasta ahora con la también actriz Verónica Echegui.

En lo profesional está viviendo un momento imparable. Y en lo personal, ¿cómo se encuentra? Se ha hablado mucho de usted...

Pues vivo. En lo personal me encuentro vivo, y en lo profesional intentando vivir, porque a veces entramos en la vorágine laboral y nos olvidamos de nosotros mismos.

¿Qué le parecen las fotos que se han publicado en las que aparece junto a Manuela Vellés?

Nada. No entro porque, desgraciadamente, tienen mucha importancia las revistas en este país. Yo solamente digo que es una pena que hagan cosas sin corroborar; es una pena. Porque la gente se lo cree y a mí nadie me ha llamado para preguntarme nada.

¿No hay relación?

No hay nada que nadie a mí me haya preguntado. Todo lo que han sacado ha sido sin que yo diga nada.

¿Y si se lo preguntamos?

Si me lo preguntas no te lo voy a responder. Si no te lo respondo no lo saques; pero a mí nadie me preguntó nada. Pero así va este país... Luego la gente se lo cree; porque es así: ven alguna revista y se lo creen. Qué pena, porque estás jugando con las emociones. ¿A ti te gustaría que hablaran de tu vida personal, de una ruptura y que te emparejaran con alguien? ¿Te gustaría o no? Piénsalo.

Si hay una bonita amistad, por qué no nos lo desmiente...

Por lo que yo he visto por la tele, y veo gente hablar de esto y lo veo en mi casa, yo pienso que lo mejor es no decir nada, porque van a seguir siempre diciendo. Y la bola no crece porque yo ahora me voy de España y no hay nada que crezca. Lo único que puedo decir es que molaría que nos respetáramos mucho más con las vidas personales. Eso es lo que quiero decir al respecto.