Carolina Cerezuela y Jaime Anglada vuelven a cantar tras su "noche más loca"
Dos días después de aparecer en la portada de la revista Cuore mientras disfrutaban de su "noche más loca", Carolina Cerezuela y Jaime Anglada volvieron a subirse a un escenario. El viernes 4 de noviembre, la pareja musical actuó en la sala Anubis, en la localidad madrileña de Pinto. Una vez más, ambos dieron muestra de una enorme complicidad, compartiendo dulces miradas mientras entonaban las letras de sus canciones.
Las fotos de Carolina Cerezuela y Jaime Anglada paseando por la noche de Madrid en actitud cariñosa han provocado toda clase de comentarios sobre un supuesto romance entre la presentadora y actriz y el músico amigo de Felipe VI, que son pareja artística desde hace unos meses.
A ello he respondido Cerezuela a través de personas de su entorno que entre ellos hay una gran amistad, camaradería profesional y que tanto el matrimonio Anglada como el suyo con el tenista Carlos Moyá mantienen una estrecha amistad donde nadie duda de nadie.
Desde que, por casualidad, grabaron juntos un anuncio publicitario y, a la vista del resultado, decidieron interpretar a dúo canciones escritas por Anglada, les han contratado en muchas ocasiones y actúan no sólo en Mallorca -donde ambos residen-, sino también en Madrid, donde antes de Pinto cantaron en la fiesta de una empresa.
Pero lo cierto es que este verano en Mallorca hubo rumores sobre la posibilidad de que su amistad pudiera convertirse en algo más. Jaime Anglada, regatista, rockero, amigo de Felipe VI -que en ocasiones acude a verle actuar con su esposa y sus hijas en sus conciertos veraniegos-, es un hombre atractivo y con éxito entre las mujeres. Está casado con una farmacéutica mallorquina y tiene dos hijos.
Por su parte, Cerezuela, presentadora, actriz (Camera café, Hospital Cental) y ahora cantante, está casada con el tenista Carlos Moyá, junto a quien es madre de tres hijos.
Con ellos apareció Anglada cuando Bertín Osborne visitó al tenista y a la actriz para el programa de Telecinco Mi casa es la tuya.
