Una de las artistas más importantes de la historia de la música actual protagoniza la portada más influyente y esperada en el sector de la moda: el September issue de September issuela revista Vogue. En septiembre sale a la venta el número especial del mensual de Condé Nast protagonizado por Beyoncé, pero, para los más impacientes, la artista estadounidense ha decidido hacer públicas a través de sus redes sociales las dos portadas.
Este número es el más importante del año, puesto que muestra todas las tendencias de la siguiente temporada en sus más de mil páginas, que cuentan con 600 anunciantes y una tirada que sobrepasa el millón de ejemplares. El año pasado la musa y protagonista de la portada de Vogue fue la actriz Jennifer Lawrence, y éste es la esposa de Jay Z la que está dispuesta a hacer historia.
Con más de un millón y medio de me gusta en la primera hora, las tres publicaciones que ha compartido la cantante han dado la vuelta al mundo en un tiempo récord. La artista ha hecho públicas dos portadas distintas y una de las imágenes que aparecerán en el interior de la revista que dirige Anna Wintour. Las tres imágenes se caracterizan por un claro despliegue de colores y por el make-up no make-up de Queen B,
Este posado si por algo se ha caracterizado ha sido por las muchas exigencias y condiciones que ha impuesto la modelo; como por ejemplo, escoger las fotografías de portada e interior, así como el fotógrafo encargado de esta tarea. El afortunado ha sido Tyler Michell, un joven de 23 años que se ha convertido en el primer fotógrafo negro que realiza una portada para la revista Vogue.