A falta de fútbol, sexo. Desaparecido el pay per view deportivo, porque ahora la Liga llega paquetizada, el cine se ha quedado como único contenido individual por el que los espectadores pagan por ver en televisión. En el primer trimestre del año, un total de 1.527.369 euros, según refleja el último informe publicado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Eso, en cine en general. En lo que respecta a cine para adultos, los clientes de las plataformas de pago se gastaron, entre enero y marzo, 323.922 euros.

Es más del doble que en el mismo trimestre del año anterior, cuando el desembolso por ver películas X fue de 129.352 euros. En todo 2015, el montante sube hasta los 879.520 euros.

En lo que respecta al cine normal El peor trimestre fue el último, en que sólo se ingresaron 940.894, casi 600.000 euros menos que en los tres meses siguientes.

Con todo, el pay per view representa una parte ínfima de los ingresos de la televisión de pago, que en el primer trimestre del año suman 622, 25 millones de euros.

El operador líder es Movistar, tanto por volumen de clientes (3.779.000) como por ingresos (550,77 millones). Le sigue, a una insalvable distancia, Vodafone, que, con 1.033.454 abonados, factura 42,64 millones.

Entre enero y marzo se ha batido el récord de abonados a la televisión de pago en España, que ya son 5.746.096. De ellos, 4,7 millones están suscritos a través de ofertas empaquetadas de televisión con servicios de telecomunicaciones.

Los ingresos totales de los servicios audiovisuales se situaron en 1.543,2 millones de euros (subvenciones incluidas), con un incremento interanual del 9,2%.