La televisión de pago volvió a batir un nuevo récord en el segundo trimestre de 2016. Ya ha superado los 5,85 millones de abonados en España, un 9,2% más que en el mismo periodo del año anterior, según el último informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). En concreto, la televisión IP y la de cable sumaron en conjunto 1,1 millones de clientes nuevos, mientras que el satélite (antes la marca Canal +) perdió 400.000. Los ingresos por cuotas de la televisión de pago también alcanzaron una nueva marca, 413,29 millones de euros en el trimestre.
El principal operador en la televisión de pago es, con 3.771.091 abonados, Movistar, que encadena dos trimestres de caídas. Un año antes, primer trimestre en que se sumaba ya la cartera de Canal +, contaba con 3.817.243 abonados, y batió sus marcas en el siguiente trimestre, con 3.939.263.
La segunda compañía es Vodafone, que alcanza máximos (1.114.818), seguida de Orange (385.876).
Por ingresos totales de la televisión de pago (récord, con 686,15 millones), el grueso es para la división audiovisual de Telefónica (614,01 millones), a una distancia inalcanzable de la segunda, Vodafone (44,12).
En cuanto al pay per view, experimenta un ligero incremento la contratación de películas (de los 1.257.806 euros gastados hace un año a los 1.338.252 del segundo trimestre de 2016), mientras que casi se triplica en el caso del cine para adultos (de 114.288 euros a 324.002).
Según la CNMC, las ofertas cuádruples (telefonía fija y móvil y banda ancha fija y móvil) y quíntuples (que suma a los servicios fijos y móviles la televisión) alcanzaron los 10,3 millones de contrataciones a junio de 2016, lo que representa 1,4 millones de paquetes más que hace un año.
En concreto, el paquete quíntuple fue el único que creció en el segundo trimestre, al sumar en el último año 1,5 millones de altas netas, hasta los 4,2 millones, mientras que el cuádruple descendió por primera vez a nivel interanual y se situó en 6,1 millones, 27.000 menos que en junio de 2015.