Los ingresos de la televisión de pago crecieron en España en el cuarto trimestre del pasado año -el de mejor rendimiento- un 24% respecto al mismo periodo de 2015, hasta sumar un total de 506 millones de euros. 543 millones de euros facturó la televisión en abierto, según ha dado a conocer la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC). El año pasado cerró con un nuevo récord de clientes de televisión premium: ya son 6.062.364, frente a los 5.535.413 de un año antes, un 9,5% más.
La compañía que encabeza ese mercado es Telefónica, con los 3.646.984 clientes con los que contaba Movistar + en el cuarto trimestre de 2016. Casi triplica los de su inmediato competidor, Vodafone (1.278.793). Aunque, eso sí, frente al mismo periodo de 2015, Movistar cede abonados (tenía entonces 3.869.387) mientras Vodafone gana más de 200.000 (964.299).
En ingresos sí que crece la multinacional presidida por José María Álvarez-Pallete: pasa de los 343,75 millones de euros que facturó en el último trimestre de 2015 a los 420,66 entre octubre y diciembre del año pasado.
Menor es el incremento de Vodafone, que pasa de 42,86 millones a 49,08.
Por otra parte, y tras una época marcada por un drástico descenso en los ingresos del pay per view al desaparecer la contratación de partidos sueltos de la Liga, se adivina cierto impulso por parte del alquiler de películas: en el cuarto trimestre de 2016, los espectadores destinaron 1.704.341 euros a ppv de cine, frente a los 940.894 euros de un año antes.
Se estanca, por su parte, el consumo de cine X previo pago: de 325.102 euros a 319.539 entre octubre y diciembre últimos.
En relación con los ingresos publicitarios (incluyendo publicidad convencional, patrocinios, televenta, telepromoción y emplazamiento de producto), la CNMC ha detallado que el conjunto del sector audiovisual ha sumado 622 millones de euros (105 millones de radio y 516 millones de televisión; 508 de estos últimos, de la televisión en abierto).