Tras la primera doble expulsión -Daniela y Vanessa- de la edición, la casa oficial de ‘GH’ se prepara para recibir a dos nuevos concursantes procedentes de la casa secreta, cuyas identidades serán anunciadas este domingo 15 de septiembre en la nueva entrega de ‘Gran Hermano. El Debate’ que Ion Aramendi conducirá a partir de las 22:00 horas en Telecinco y que arrancará antes con contenido exclusivo en Mitele PLUS.
Estos dos concursantes, cuyo traslado definitivo se producirá el próximo martes, tendrán la oportunidad el domingo de realizar una primera visita de prospección a la casa oficial, en la que, al igual que sucedió con Luis y Violeta, no estarán solos.
Además, tendrá lugar la resolución de la primera prueba semanal y ‘Gran Hermano’ anunciará el veredicto sobre si el grupo de concursantes la ha superado o no, de lo que dependerá el presupuesto para hacer la compra. En este sentido y como gran novedad, también habrá un ganador individual, que se convertirá en el primer ‘Big Bro’ de la edición y será recompensado con un poder inédito en ‘GH’ que afectará directamente a sus compañeros provocando un trascendental cambio en la casa.
Por otro lado, ‘GH’ comunicará a los concursantes la lista de nominados tras la primera ronda de expulsión por parejas celebrada anoche y avanzará los porcentajes ciegos de votos acumulados para la próxima doble expulsión.
Por último, un nuevo colaborador con gran capacidad para divertir hará ‘enloquecer’ el plató al sumarse a Adara Molinero, Marta Peñate, Lucía Sánchez, Belén Rodríguez, Miguel Frigenti y Frank Blanco y a los defensores de los cinco candidatos a la doble expulsión para comentar la última hora de la convivencia, en la que destaca las primeras horas juntos de Vanessa y Javier en la casa secreta tras las dudas manifestadas por la concursante sobre la relación que ambos mantienen; los cambios en algunas alianzas en la casa oficial que ha generado la expulsión de la concursante gallega; y el riesgo que están asumiendo Nerea, Luis y Violeta para mantener su secreto, que en caso de ser descubierto supondría su expulsión fulminante de la casa.