Llevábamos más o menos 70.000 nuevos donantes de órganos con la campaña de 12 meses –ahora somos 214.000- cuando llegó a mi despacho una carta de la Sociedad Española de Neurología. Los médicos habían visto en nuestros canales la campaña “Eres perfecto para otros” y nos pedían ayuda para difundirSociedad Española de NeurologíaEres perfecto para otros los principales síntomas de un ICTUS Según nos contaron, desde hace algunos años existe un tratamiento que consigue salvar vidas o reducir drásticamente los efectos de un accidente vascular en el cerebro, siempre que se llegue al hospital antes de cuatro horas del primer síntoma.
Al hilo de ese nuevo tratamiento se creó en la sanidad pública un protocolo de emergencia para actuar antes de esas cuatro horas, pero apenas se utiliza porque la mayoría de la población desconoce los síntomas. Aunque parezca mentira, los más habituales son muy sencillos de conocer y recordar: dificultad para mover un brazo o una pierna, alteraciones en el habla o parálisis facial.
Era un reto perfecto para 12 meses: conseguir que toda España aprenda que tiene que llamar al 112 –o al 061 en algunas comunidades- si nota que una persona ha perdido la coordinación en brazos o piernas, no puede hablar o habla de forma incomprensible, o tiene parte de la cara paralizada. Contamos con nuestro saber hacer en publicidad social y comunicación –ya 13 años de 12 meses-, con nuestros canales y nuestras webs, y con la colaboración siempre desinteresada de nuestras estrellas y profesionales.
12 meses es un trabajo del equipo Mediaset, un equipo al que se van sumando organizaciones, médicos, artistas o deportistas según la causa. Hoy es el día mundial para la prevención del Ictus, y la campaña del último mes se concentra en nuestros medios para llegar con la información al último rincón del país. Hoy recuerdo que la primera vida que salvó esta campaña cuando aún todavía no se había formulado, fue la de una persona muy querida para mí. Con la decisión de sumar la causa a 12 meses, y la información aportada por los neurólogos, sonó el teléfono en la medianoche de un domingo en casa porque un ser querido “movía un brazo sin ton ni son y hablaba raro”. Entendí que había que llegar cuanto antes a un hospital. Fue el Ramón y Cajal de Madrid. Sé que a pesar de toda la prevención algunas veces no resulta, pero en la Unidad de Ictus dirigida por el doctor Jaime Masjuan. ¡Gracias!
Asterisco: Como mi agenda es ingobernable, en lugar de comentarios propongo Twitter para seguir los temas.