El año pasado desde 12 Meses apoyamos el estreno en cines de “La Intérprete”. Si no pudiste verla en su momento, te ofrecemos la posibilidad de hacerlo ahora en Mitele.
Como nos ha contado Antonio Pérez Molero, director del documental, la historia surgió tras conocer a Silvia y la labor que desempeña como enfermera informando a los familiares sobre la donación de órganos. El proceso se percibe como algo mecánico, pero detrás de él hay sentimientos, emociones y mucha solidaridad.
Antonio P. Molero nos desvela las claves por las que no debes dejar de pasar la oportunidad de ver este gran trabajo.
“No tengo especial habilidad con los idiomas, por eso creo que me impresionó tanto el trabajo de Silvia cuando la conocí. Si expresar nuestros sentimientos nos resulta muchas veces difícil, imaginad como debe de ser hacerlo en otro idioma que no sea el tuyo. Cómo debe ser trasmitir en otra lengua, y a personas casi desconocidas, tu solidaridad y apoyo ante la pérdida de un ser querido. Y al mismo tiempo, en esos momentos tan duros, ser capaz de hacerles ver la necesidad vital que otras personas tienen de alguno de los órganos de tu padre, hermano o hijo, recién fallecidos. Este es el trabajo de Silvia.
La donación de órganos me pareció una de las manifestaciones más grandes de la comprensión y solidaridad humana. Y el trabajo de Silvia y el resto de profesionales que atienden a las familias, siempre en los medios de comunicación a la sombra de los aclamados cirujanos, uno de los más difíciles. Por eso me pareció imprescindible contar su historia.
Pero desde que comenzamos a elaborar este documental en 2009 muchas cosas cambiaron en nuestras vidas. Llegó la crisis económica y se llevó por delante gran parte de nuestro sueño de vivir en una sociedad del bienestar.
España, líder mundial en donación de órganos, gracias en gran medida a la solidaridad de la población, no fue una excepción. No podíamos dejar de preguntarnos también, qué habría sucedido con la solidaridad de la sociedad española, maltratada por la crisis económica, sin empleo, con peores salarios y servicios públicos y con su sanidad pública amenazada de privatización.
Nuestros distintos gobiernos no dejan de sacar pecho por nuestro liderazgo mundial en donación de órganos, al tiempo que siguen planteando recortes presupuestarios e intentos de privatización, más o menos velados, en nuestra sanidad pública. Cuando es precisamente el carácter público, universal y gratuito de nuestro sistema de donación y trasplantes, una de las bases de su éxito.
Sanidad para todos, órganos también para todos”