Os presentamos a nuestro amigo Dani, la sonrisa de la esperanza

Daniel López es un niño de seis años que tiene el Síndrome de Sanfilippo, una de las denominadas 'enfermedades raras' que afecta al sistema nervioso central y se da en uno de cada 50.000 nacimientos.

Pero ésta no es una historia de dolor, es una historia de esperanza, lucha, compañerismo y amistad, porque Dani es todo eso, y mucho más. Dani irradia luz allá por donde va, dejando un sendero de felicidad y optimismo que se contagia en todos aquellos que tienen la fortuna de compartir su vida con él. Sus padres, sus amigos y sus profesores aprenden cada día de su experiencia.

Les ha enseñado que los problemas se pueden solucionar con un abrazo y una sonrisa, que hay que poner pasión en todo lo que se hace, que el compañerismo y la generosidad son valores que se aprenden compartiendo, y que la alegría puede surgir de cualquier situación.

Cuentan sus compañeros que en la cabeza de Dani “hay células que van corriendo, pero se van durmiendo”, pero que también se despiertan con los estímulos de todo lo que encuentra a su alrededor, y es que él tiene un súper poder que le permite encontrarle la esencia a todo lo que se cruza en su camino. Le gusta todo: los coches, los juegos, los abrazos, los animales... ¡y su novia!

El placer de valorar cada instante, degustando la compañía de todos aquellos que le quieren, que son todos los que le conocen, porque es imposible no impregnarse de sus carcajadas y ver el mundo de colores más llamativos cuando él nos presta su mirada.

Su profesor se admira cuando es testigo de cómo Dani les enseña a pensar de manera diferente, a abrir su corazón: “Los niños han dejado de pensar en ellos mismos y han empezado a pensar en los demás gracias a él”.

Sus padres son miembros de la Fundación Stop Sanfilippo, una asociación que lucha porque se invierta más dinero en investigación para avanzar en el tratamiento y cura de este síndrome que, por estar considerado una enfermedad muy minoritaria, no es prioritario para los estudios médicos.

Organizan carreras solidarias, partidos benéficos, recaudan fondos con el reciclaje de teléfonos móviles, y todas las iniciativas que ponen en marcha tienen como fin poder financiar proyectos que ayuden a tratar el Síndrome Sanfilippo.

No podemos olvidarnos de las personas especiales, esos súper héroes que impregnan el mundo de felicidad, aquellos que tienen la clave de la alegría y nos enseñan a descubrir el lado más optimista de las cosas. No hay nada más valioso que compartir la receta de la risa, y eso es lo que los niños como Dani nos regalan con cada gesto, por eso hay tenemos que poner de nuestra parte para que nunca nos quedemos sin sus lecciones.

Aquí puedes ver el precioso reportaje que le dedicaron en Noticias Cuatro y conocerle mejor.