En el último programa de 'Amores que Duelen' Marina cuenta su cambió de identidad para escapar del maltrato
Hoy, miércoles 26 de noviembre, a las 00.45, en Telecinco, se emite el último programa de 'Amores que Duelen', que cuenta los testimonios de mujeres que han conseguido salir de la violencia de género, que han emprendido una nueva vida gracias a su decisión de plantar cara a su situación.
En este último programa, Marina Martín, una mujer que se encontró sumida en una relación perjudicial, en la que sufría episodios violentos por parte de su pareja, cuenta cómo tuvo que solicitar un cambio de identidad para garantizar su seguridad y la de su hijo. Marina ha escrito varios libros, fruto de su experiencia, y en 12 Meses tuvimos la oportunidad de entrevistarla para que nos contara más sobre sus publicaciones.
Gracias a programas como éste, y a la valentía de las mujeres que participan compartiendo su experiencia, se realiza una denuncia que resulta vital y necesaria para animar a otras personas en situaciones similares a que busquen la salida a esta lacra social.
Precisamente ayer, con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, tuvo lugar un acto en el Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad que comenzó con el recuerdo a las 45 víctimas de violencia de género que han sido asesinadas a lo largo de 2014, y concluyó con una entrega de premios en las que las ocho participantes en el programa 'Amores que Duelen' fueron galardonadas como reconocimiento por atreverse a contar sus historias de maltrato.
Deborah, la más joven de las ocho, fue la elegida para hablar en nombre de todas porque su caso es un ejemplo de lo que persigue la nueva campaña de sensibilización que lanzó el Ministerio para prevenir la violencia machista desde sus manifestaciones más tempranas. Pretende así, ayudar a los adolescentes a detectar los primeros signos de maltrato.En su discurso, Deborah animó a denunciar para poder salir de la violencia de género: “No tengáis miedo a contar lo que os pasa. Yo viví con miedo desde los 17 a los 20 años. Pero un día superé el miedo y hoy puedo asegurar que se puede escapar de la violencia”.
La ministra de Sanidad, Ana Mato, recordó que los últimos estudios han detectado un aumento de las prácticas de acoso y vigilancia entre los adolescentes, realizadas habitualmente a través de las nuevas tecnologías. También ha señalado que se ha registrado un repunte en el sexismo entre los adolescentes, algo especialmente preocupante, teniendo en cuenta que éste es el germen del que evolucionan las primeras señales de violencia de género, y que es importante aprender a identificar.
