Te damos 9 claves para entender la diferencia entre SIDA y VIH
- Desde el primer momento en que el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) entra en el cuerpo se considera que la persona es seropositiva al VIH. Esto es lo que también conocemos como “tener anticuerpos”.
- Cuando el VIH entra en el cuerpo humano comienza a multiplicarse, destruyendo progresivamente unas células, los linfocitos CD4, que se encargan de defendernos de las enfermedades infecciosas.
- Con el paso del tiempo y si no se actúa para evitarlo, esta disminución de las defensas (sistema inmunitario) puede llegar a ser tan importante que deje a la persona en riesgo de sufrir una serie de infecciones (denominadas oportunistas) de las que habitualmente estamos protegidos.
- El tiempo que puede pasar (si no se toma tratamiento) desde que la persona se infecta hasta que desarrolla alguna de estas infecciones oportunistas es muy variable. A veces pueden pasar bastantes años. Por ello, es muy importante hacerse la prueba del VIH sin esperar a tener síntomas.
- Hay riesgo de que aparezcan infecciones oportunistas si los CD4 tienen valores inferiores a 200.
- Hablamos de SIDA cuando ha aparecido alguna de estas infecciones oportunistas. Aunque la persona haya desarrollado el sida, puede ser que supere la infección oportunista que ha motivado este diagnóstico y recupere un buen estado de salud.
- Las infecciones oportunistas son las que realmente pueden poner en riesgo la vida de la persona. Aunque se pueden tratar, siempre será más conveniente evitar que la persona llegue a una situación como esta.
- La cantidad de virus que circula por la sangre se conoce como carga viral y se expresa en número de copias de VIH que hay en un mililitro de sangre. Cuando la carga viral es elevada, los CD4 disminuyen más rápidamente. Por eso, cuanto más baja sea la carga viral, mejor.
- Los tratamientos antirretrovirales actuales frenan la multiplicación del virus. Esto permite que las defensas no bajen o incluso aumenten, evitando así el riesgo de aparición de infecciones.