@page { margin: 2cm } P { margin-bottom: 0.21cm } Cada rincón tiene su atractivo, su clima, su vegetación, su fauna y sus peculiaridades. Su biodiversidad tiene una riqueza infinita que encandila en cada una de sus formas. Por eso, la conservación de sus ecosistemas es una labor que los norteamericanos cuidan con dedicación.
Los Estados Unidos cuentan con casi 400 Parques Nacionales, que conforman un gran catálogo de diversidad, paisajes y tamaños, desde la Reserva Wrangell-St. Elia, en Alaska, con 53.000 Km cuadrados, al National Memorial Tadeo Kosciuszko, en Pennsylvania, que ocupa apenas 80 metros cuadrados.
Es prácticamente imposible intentar abarcarlos todos, así que vamos a dar un paseo por los más espectaculares.
Yellowstone
Situado entre los estados de Idaho, Montana y Wyoming, es el Parque Nacional más popular del país, y también el más antiguo gracias a su designación en 1872. Cada año recibe la visita de 3 millones de turistas que llegan atraídos por los tesoros que guarda en sus 9.000 kilómetros cuadrados de extensión.
Un paraíso para los geólogos, que pueden apreciar la caldera volcánica que ocupa el epicentro del parque, los cientos de geisers, muestras de que el magma sigue fluyendo bajo su corteza, y las gargantas del Yellowstone River Canyon y el Lewis Canyon.
Sus ríos y lagos bañan las orillas cubiertas por bosques de olmos y sauces, en los que habitan lobos, bisontes, serpientes de cascabel, águilas de cabeza blanca, ciervos, marmotas y los míticos osos Grizzly, que inspiraron a la serie de dibujos animados de 'El oso Yogi'.
Gran Cañón del Colorado
Corazón de Arizona, el Gran Cañón excavado por el río Colorado es uno de los accidentes geológicos más espectaculares de nuestro planeta. Fue nombrada Patriomonio de la Humanidad por la Unesco en 1979, y sus casi 5.000 kilómetros cuadrados son considerados una de las maravillas naturales del mundo. Sus profundas gargantas de hasta 1.500 metros de profundidad, han tallado caprichosas grutas en la montaña, algunas de ellas abiertas a los visitantes, que pueden admirar su cuevas de estalactitas y estalagmitas.
Pumas, linces, coyotes y cabras se pasean entre sus rocas, bajo la atenta mirada del cóndor de California, un ave protegida, que planea sobre sus cabezas. Muy recomendable la panorámica que se observa desde el 'Skywalk', un mirador que consta de una pasarela de cristal que te permite ver el vacío bajo tus pies a 1.300 metros de altura. Una experiencia no apta para quienes sufran de vértigo.
Yosemite
Situado en California, es una de las paradas obligatorias para aquellos que estén recorriendo la Ruta 66. Entre sus principales atractivos, el valle de Yosemite tiene unos grandes saltos de agua, acantilados de granito, ríos de aguas cristalinas, y más de 1.300 Km de senderos que se adentran en su vegetación. El 95% de su área está considerada 'zona salvaje'.
Patrimonio de la Humanidad, es un santuario cuyos guardianes son las sequoias gigantes que custodian sus bosques. Estos árboles milenarios son los más altos del planeta, llegando a alcanzar los 115 metros de altura y los 11 metros de diámetro, aunque el mejor lugar para admirar a estos gigantes vegetales es el Parque Nacional de las Sequoias, también en California, lugar en el que se encuentra el 'General Sherman', que presume de ser el árbol más alto del mundo.
Bosque Petrificado
Al norte del estado de Arizona, encontramos este árido paraje que cuenta con la mayor concentración de madera petrificada del mundo. Repleta de coloridos, este bosque de rocas alterna los fondos en ocre, con tonos rojizos y terrosos, decorados con pinceladas verdes de los pocos arbustos que crecen en medio de este paisaje desértico que, sin embargo, sorprende por su vistosidad.
Bahía de los Glaciares
Para cambiar totalmente de paisaje, nos desplazaos hasta las tierras del norte: Alaska. Con paisajes únicos, la bajada de los glaciares desde las cumbres nevadas hasta la bahía es un espectáculo que nos ayuda a comprender la creación de icebergs. El glaciar más famoso de la bahía es el de Muir, con 80 metros de espesor.
Llegar allí por carretera es prácticamente imposible, pero esto te da la oportunidad de viajar en ferry atravesando el estrecho Icy o el Cross Sound. Su fauna se compone de osos, ciervos, cabras montesas, aves acuáticas y ballenas.
Islas Vírgenes
Para terminar con un clima más paradisiaco, nos trasladamos al Parque Nacional de las Islas Vígenes. Un archipiélago plagado de bosques tropicales por los que serpentean numerosos senderos, playas de ensueño y fondos marinos perfectos para bucear. Una de las atracciones principales del parque es Trunk Bay, que posee una playa de arena blanca con un sendero submarino para buceadores.
Hawai
El Parque Nacional de los Volcanes, en Hawai, es el resultado de cientos de miles de años de actividad volcánica en las islas. Como techo del archipiélago, vigilante, se encuentra en Mauna Loa, que con sus 4.170 metros de altura es el volcán más grande de la tierra. Un paisaje cubierto por negras rocas volcánicas, un paisaje lunar que termina en las paradisiacas playas de Hawai.
10 Especies protegidas de los Estados Unidos